El problema es que crees que tienes tiempo… -Buddha

¿Qué he aprendido esta pandemia? La principal lección es que no hay suficiente tiempo para alcanzar a hacer todo lo que uno tiene en mente. Hemos visto cómo se nos escapa la vida entre las manos y no podemos hacer nada al respecto. La gente se muere y no hay más. Un virus que nos atacó de la nada y no estuvimos preparados y se llevó a una gran cantidad de población que no tuvo tiempo para poner las cosas en orden, es más ni para decir adiós.

Ahora bien, los que seguimos vivos… obviamente esta situación también nos está afectando de cierta manera. Confieso que en mi caso potencializó mi consumo de sustancias y no pude más. Una cosa llevó a la otra y los problemas se me juntaron haciéndose como una bola de nieve, llegando a tal punto que ya no pude detenerlos.

2020 fue para mi un año de 3 sobredosis, 40 sesiones de rehabilitación de terapia física porque no podía caminar, y por supuesto 3 meses de internamiento en una clínica de rehabilitación por consumo de sustancias. Afortunadamente hoy en día llevo 7 meses limpia, sin consumo y reconstruyendo poco a poco mi vida. Claro que no estoy sola y esto no lo podría haber logrado sin el apoyo de mi familia y de mis amigos ♥️

No hay secretos. Creo que es muy simple, aunque a veces todavía me cuesta trabajo, la verdad. Pero son un conjunto de datos que sabemos y están ahí en el fondo de nuestro cerebro, pero no atendemos porque creemos que siempre habrá tiempo, y nos dejamos para después. NOS DEJAMOS A NOSOTROS MISMOS AL ÚLTIMO. Terrible, ¿no?

Honestamente, a pesar de que 2020 fue un año muy caótico ya de por sí para el mundo en general y por mi situación para mi también, estoy sumamente agradecida con mi adicción. Vino a cambiarme la vida. Sé que existe un Poder Superior (como cada quien lo conciba), que estuvo ahí en cada una de mis sobredosis y que dijo “no no, aquí te quedas porque hay cosas pendientes” y pues creo que tengo una misión todavía y eso es parte de mi motivación todos los días… aunque a veces me cueste muchísimo levantarme.

Ahora bien, no por esto me siento una sabelotodo ni nada por el estilo. Solo hablo desde esta experiencia en específico. Y la comparto por si a alguien le sirve.

Los datos que sé que todos tenemos en la cabeza pero que a veces se nos llegan a olvidar y me gustaría recordárselos son los siguientes:

  • Agradecer lo que tenemos: llevar un diario de agradecimiento es una maravilla, aunque no escribamos todos los días, escribir algo diferente (o sea que no sea como una plana) agradecer por tus papás, por tu trabajo, por las personas que conoces, amigos, experiencias nuevas, etc… todo lo que nos sucede nos deja una lección y a veces no lo valoramos lo suficiente.
  • Decir no cuando no queremos: no debería dar más explicación de este punto. Si no estamos tranquilos con algo, pues vámonos.
  • Ir pensando en un plan de vida: y digo ir pensando porque está difícil. Pero considerar el clásico ¿cómo te ves en 5-10-20 años? ¿En qué trabajo? ¿Con hijos? Y ese tipo de preguntas… tal vez eso pueda ayudar a que puedas decidir a quién dejar entrar en tu vida más a profundidad y a quién no.
  • Medita: estar en contacto con uno mismo es importantísimo. Solito, aprovechando unos 15 minutos al día, en los que puedas despejar tu mente de absolutamente todo. Borrón y cuenta nueva.
  • Pedir ayuda: por cualquier situación que te aqueje… puede ser a mamá, a papá, al abuelo, a la amiga, al maestro, al amigo, al payaso, al padrino o a quien mas confianza le tengas. Pedir ayuda no es un signo de debilidad. Al contrario. Es fortaleza y humildad.
  • Ir a terapia: Puto el que diga que no la necesita (con todo respeto a los gays, es solo una expresión). O sea, pero siempre hay algo que se nos atora y definitivamente necesitamos una perspectiva diferente de un especialista que nos diga las cosas. No hay que quedar 🤡
  • Hacer cosas por nosotros mismos, que nos gusten: manicure, ejercicio, ir a comer nuestra comida favorita… o lo que sea sólo porque sí. Sin mayor explicación. No sabemos si mañana estaremos para nosotros mismos.
  • Marcharte si no te quieren: amor propio… vaya, si ya te dijeron y ya te demostraron que no te quieren de mil maneras… pues ya quiérete tú y vete. Gástate tu tiempo, energía y demás recursos en ti. Primero tu paz y a la chingada lo demás 🙃
  • Tu familia no siempre es a fuerzas tu roca: Híjole. Qué pesado punto. Pero pues si no hay click no hay y ya. No por un “lazo de sangre” significa que uno se tenga que aguantar los desprecios, los insultos y las canalladas. Ante todo, la cordialidad… pero hasta ahí.
  • Salud financiera: ufffff esto nos quita mucha salud mental… empezar a ahorrar lo más jóvenes es lo mejor. Literal hacer una tablita de Excel y armar nuestros gastos y proyecciones nos puede ayudar bastante. Un cursito de adulting o de marketing nunca está de más.
  • Salud física: llega una edad en la que pues ya hay que darle mantenimiento al cuerpo. Un check up al año, la limpieza dental cada 6 meses, el Pap para las mujeres igual cada añito… y pues salud sexual también, sin globo no hay fiesta y yo diría que hoy en día la cosa ya es que papelito habla y la verdadera prueba de amor es que te enseñen que no hay ninguna ETS de por medio… pero pues cada quien….
  • Servicio social: claro primero está uno mismo pero también es muy importante regresar un poco de todo lo que se te ha dado a ti. Si tienes la oportunidad de compartir un poco de ti, hazlo. No tiene que ser dinero. Puede ser conocimiento, tiempo, amor. Esto además de ayudar a alguien más, te puede ayudar a ti mismo en formas que ni te imaginas.

Esto se los comparto desde mi insomnio.

Desde mi corazón.

Desde todo el deseo de que nunca caigan en la desesperación de una situación del consumo de sustancias.

Un abrazo a todos.

Felices 24.

Sólo por hoy 😉

Deja un comentario

Crea un blog o un sitio web gratuitos con WordPress.com.

Subir ↑